La verdad es que solo podemos contar bondades tanto del alojamiento como de la propietaria.
A la casa no le faltaba un detalle, el jardín es perfecto si llevas perro. Lugar muy tranquilo pero con todo cerca. Gastronomía, playas, sitios para visitar, etc...
La anfitriona, que tiene la casa como un pincel, nos facilito información de todo lo que debíamos ver, donde comer, etc... muy de agradecer, la verdad.
Solo se puede decir que... "hemos estado en casa"